12. Pero ¿qué es eso que deseas que exige su muerte?
2¿Cómo puedes estar seguro de que tu ataque asesino está
justificado, a menos que sepas cuál es su propósito? 3Aquí es donde
el "último" principio del caos acude en tu "auxilio". 4Este
principio alega que hay un substituto para el amor. 5Ésta es la
magia que curará todo tu dolor, el elemento que falta que curaría tu locura. 6Ésa
es la razón de que tengas que atacar. 7He aquí lo que hace que tu
venganza esté justificada. 8He aquí, revelado, el regalo secreto del
ego, arrancado del cuerpo de tu hermano donde se había ocultado con malicia y
con odio hacia aquel a quien verdaderamente le pertenece. 9Él te
quiere privar de ese ingrediente secreto que le daría significado a tu vida. 10El
substituto del amor, nacido de vuestra mutua enemistad, tiene que ser la
salvación. 11Y no tiene substitutos, pues sólo hay uno. 12Y
así, el propósito de todas tus relaciones es apropiarte de él y convertirte en
su dueño.
13. Mas nunca podrás poseerlo del todo. 2Y
tu hermano jamás cesará de atacarte por lo que le robaste. 3Y la
venganza de Dios contra vosotros dos tampoco cesará, pues en Su locura Él tiene
también que poseer ese sustituto del amor y destruiros a ambos. 4Tú
que crees ser cuerdo y caminar por tierra firme en un mundo en el que se puede
encontrar significado, considera lo siguiente: Éstas son las leyes en
las que parece basarse tu "cordura". 5Estos son los
principios que hacen que el suelo que pisas parezca firme. 6Y es ahí
donde tratas de encontrar significado. 7Esas son las leyes que
promulgaste para tu salvación. 8Apoyan firmemente al sustituto del
Cielo que prefieres. 9Ése es su propósito, pues para eso es para lo
que fueron promulgadas. 10No tiene objeto preguntar qué significado
tienen. 11Eso es obvio. 12Los medios de la locura no
pueden sino ser dementes. 13¿Estás tú igualmente seguro de que
comprendes que su objetivo es la locura?
14. Nadie desea la locura, ni nadie se aferra a su
propia locura si ve que eso es lo que es. 2Lo que protege a la
locura es la creencia de que es la verdad. 3La función de la
demencia es usurpar el lugar de la verdad. 4Para poder creer en la
demencia hay que considerarla la verdad. 5Y si es la verdad,
entonces su opuesto, que antes era la verdad, tiene que ser ahora la locura. 6Tal
inversión, en la que todo está completamente al revés: en la que la demencia
es cordura, las ilusiones verdad, el ataque bondad, el odio amor y el asesinato
bendición, es el objetivo que persiguen las leyes del caos. 7Esos
son los medios que hacen que las leyes de Dios parezcan estar invertidas. 8Ahí
las leyes del pecado parecen mantener cautivo al amor y haber puesto al pecado
en libertad.
15. Ésos no parecen ser los objetivos del caos, pues
gracias a la gran inversión parecen ser las leyes del orden. 2¿Cómo
podría ser de otra manera? 3El caos es la ausencia total de orden, y
no tiene leyes. 4Para que se pueda creer en él, sus aparentes leyes
tienen que percibirse como reales. 5Su objetivo de demencia tiene
que verse como cordura. 6Y el miedo, con labios mortecinos y ojos
que no ven, obcecado y de aspecto horrible, es elevado al trono del amor, su
moribundo conquistador, su substituto, el que te salva de la salvación. 7¡Cuán
bella hacen aparecer a la muerte las leyes del miedo! 8¡Dale gracias
al héroe que se sentó en el trono del amor y que salvó al Hijo de Dios para
condenarlo al miedo y a la muerte!
16. Sin embargo, ¿cómo es posible que se pueda creer
en semejantes leyes? 2Hay un extraño mecanismo que hace que ello
sea posible. 3Es algo que nos resulta familiar, pues hemos visto en
innumerables ocasiones cómo parece funcionar. 4En realidad no
funciona en absoluto, mas en sueños, donde los protagonistas principales son
sólo sombras, parece ser muy poderoso. 5Ninguna de las leyes del
caos podría coaccionar a nadie a que creyese en ella, si no fuera por el
énfasis que se pone en la forma y por el absoluto desprecio que se hace del
contenido. 6Nadie que crea que una sola de estas leyes es verdad se
da cuenta de lo que dicha ley estipula. 7Algunas de las formas que
dichas leyes adoptan parecen tener sentido, pero eso es todo.
17. ¿Cómo es posible que algunas formas de asesinato
no signifiquen muerte? 2¿Puede acaso un ataque, sea cual sea la
forma en que se manifieste, ser amor? 3¿Qué forma de condena podría
ser una bendición? 4¿Quién puede incapacitar a su salvador y hallar
la salvación? 5No dejes que la forma que adopta el ataque contra tu
hermano te engañe. 6No puedes intentar herirlo y al mismo tiempo
salvarte. 7¿Quién puede estar a salvo del ataque atacándose a sí
mismo? 8¿Cómo iba a importar la forma en que se manifiesta esta
locura? 9Es un juicio que se derrota a sí mismo, al condenar lo que
afirma querer salvar. 10No te dejes engañar cuando la locura adopte
una forma que a ti te parece hermosa. 11Lo que está empeñado en
destruirte no es tu amigo.
18. Sostienes -y piensas que es verdad- que no crees
en estas leyes insensatas ni que tus acciones están basadas en ellas. 2Pues
cuando examinas de cerca lo que postulan, ves que no se puede creer en ellas. 3Hermano,
crees en ellas. 4Pues de no ser así, ¿cómo podrías percibir
la forma que adoptan, con semejante contenido? 5¿Podría acaso ser
sostenible cualquiera de las formas que adoptan? 6Sin embargo,
crees en ellas debido a la forma que adoptan, y no adviertes el
contenido. 7Éste nunca cambia. 8¿Puedes acaso darle vida
a un esqueleto pintando sus labios de color rosado, vistiéndolo de punta en
blanco, acariciándolo y mimándolo? 9¿Y puede acaso satisfacerte la
ilusión de que estás vivo?
19. Fuera del Cielo no hay vida. 2La vida
se encuentra allí donde Dios la creó. 3En cualquier otro estado que
no sea el Cielo la vida no es más que una ilusión. 4En el mejor de
los casos parece vida, en el peor, muerte. 5Ambos son, no obstante,
juicios acerca de lo que no es la vida, idénticos en su inexactitud y falta de
significado. 6Fuera del Cielo la vida es imposible, y lo que no se
encuentra en el Cielo no se encuentra en ninguna parte. 7Fuera del
Cielo lo único que hay es un conflicto de ilusiones, de todo punto insensato,
imposible y más allá de la razón, aunque se percibe como un eterno impedimento
para llegar al Cielo. 8Las ilusiones no son sino formas. 9Su
contenido nunca es verdad.
20. Las leyes del caos gobiernan todas las
ilusiones. 2Las formas que éstas adoptan entran en conflicto,
haciendo que parezca posible concederle más valor a unas que a otras. 3Sin
embargo, cada una de ellas se basa, al igual que todas las demás, en la
creencia de que las leyes del caos son las leyes del orden. 4Cada
una de ellas apoya dichas leyes completamente, y ofrece un testimonio
inequívoco de que son verdad. 5Las formas de ataque que en
apariencia son más benévolas no son menos inequívocas en su testimonio o en sus
resultados. 6Es indudable que el miedo que engendran las ilusiones
se debe a las creencias que las originan y no a su forma. 7Y la
falta de fe en el amor, sea cual sea la forma en que se manifieste, da
testimonio de que el caos es la realidad.
21. La fe en el caos es la consecuencia inevitable
de la creencia en el pecado. 2El que sea una consecuencia es lo que
hace que parezca ser una conclusión lógica, un paso válido, en el pensamiento
ordenado. 3Los pasos que conducen al caos proceden de manera ordenada
desde su punto de partida. 4Cada uno de ellos se manifiesta en forma
diferente en el proceso de invertir la verdad, y conduce aún más profundamente
al terror y más allá de la verdad. 5No pienses que un paso es más
corto que otro ni que el retorno desde uno de ellos es más fácil que desde
otro. 6En cada uno de ellos reside el descenso desde el Cielo en su
totalidad. 7Y allí donde tu pensamiento empieza, allí mismo tiene
que terminar.
22. Hermano, no des ni un solo paso en el descenso
hacia el infierno. 2Pues una vez que hayas dado el primero, no
podrás reconocer el resto como lo que son. 3Y cada uno de ellos
seguirá al primero. 4Cualquier forma de ataque te planta en la
tortuosa escalera que te aleja del Cielo. 5Sin embargo, en cualquier
instante todo esto se puede deshacer. 6¿Cómo puedes saber si has
elegido las escaleras que llevan al Cielo o el camino que conduce al infierno?
7Muy fácilmente. 8¿Cómo te sientes? 9¿Estás en
paz? 10¿Tienes certeza con respecto a tu camino? 11¿Estás
seguro de que el Cielo se puede alcanzar? 12Si la respuesta es no,
es que caminas solo. 13Pídele entonces a tu Amigo que se una a ti y
te dé certeza con respecto al camino a seguir.
LECCIÓN 267
Mi corazón late en la paz de Dios.
1. Lo que me rodea es la vida que Dios creó en Su
Amor. 2Me llama con cada
latido y con cada aliento; con cada acción y con cada pensamiento. 3La paz llena mi corazón e inunda mi cuerpo con el
propósito del perdón. 4Ahora mi mente ha sanado, y se me concede
todo lo que necesito para salvar al mundo. 5Cada latido de mi
corazón me inunda de paz; cada aliento me infunde fuerza. 6Soy un
mensajero de Dios, guiado por Su Voz, apoyado por Su amor y amparado
eternamente en la quietud y en la paz de Sus amorosos Brazos. 7Cada latido de mi corazón invoca Su Nombre, y cada
uno es contestado por Su Voz, que me asegura que en Él estoy en mi hogar.
2. Que preste atención sólo a Tu Respuesta, no
a la mía. 2Padre, mi
corazón late en la paz que el Corazón del Amor creó. 3Y es ahí y sólo ahí donde estoy en mi hogar.
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